No llores, cariño
Helados me miran, rebosan de lágrimas, y yo te hablo, dándote ánimos para continuar luchando por tus sueños, tan al alcance de tus manos. "No debes rendirte" - te digo- "Si te esfuerzas un día lo conseguirás, tarde o temprano"- te abrazo fuerte y te digo -"no llores, cariño".
Tus sueños se harán realidad, y tambien los míos, pues de algún modo, cuando te conocí empezaron a cumplirse y desde entonces no han dejado de hacerlo.